viernes, 12 de junio de 2009

El Papa denuncia que la secularización avanza también dentro de la Iglesia


RD/Efe).-Benedicto XVI denunció hoy, festividad del Corpus Christi, que dentro de la Iglesia católica también avanza la secularización, "que puede traducirse en un culto eucarístico vacío y la tentación de reducir los rezos a momentos superficiales y apresurados.El Papa también pidió a Jesús que libere al mundo "del veneno del mal, de la violencia y del odio que contamina las conciencias".El Pontífice hizo estas manifestaciones ante unas 25.000 personas que asistieron en la basílica romana de San Juan de Letrán, la catedral de Roma, a la misa solemne que ofició con motivo del Corpus Christi y a la posterior procesión por las calles del centro de la Ciudad Eterna.

En una homilía en la que resaltó la importancia de la Eucaristía y la figura del sacerdote, el Papa dijo que los fieles "esperan" que los sacerdotes den ejemplo de un auténtica devoción por la Eucaristía y que "aman" ver al sacerdotes transcurrir largos momentos de silencio y de adoración ante Jesús.

Aunque renovó la fe en la real presencia de Cristo en la Eucaristía, el anciano Pontífice agregó que "no hay que dar por descontada esta fe".

"También dentro de la Iglesia existe hoy el riesgo de una secularización que se va deslizando, que puede traducirse en un culto eucarístico formal y vacío, en celebraciones privadas de aquella participación del corazón que se expresa en veneración y respeto por la liturgia", denunció el Papa.

Benedicto XVI agregó que cada vez "es más fuerte la tentación" de reducir la plegaria a momentos superficiales y apresurados, dejándose llevar por las actividades y las preocupaciones terrenales".

El Papa teólogo imploró a Jesús que se quede con los hombres y "libere este mundo del veneno de mal, de la violencia y del odio que contamina las conciencias" y que lo "purifique" con su poder y su amor misericordioso.

Benedicto XVI dio la comunión a un grupo de fieles, sin entregarla en la mano, sino dándosela directamente en la boca y arrodillados, como ya es habitual en él.

La festividad del Corpus Christi fue instituida por el papa Urbano IV en 1264, debido al llamado "milagro de Bolsena".

En 1263 un sacerdote bohemio, Pedro de Praga, se dirigía hacia Roma cuando se detuvo en la cercana localidad de Bolsena para oficiar misa. El cura dudaba de la presencia real de Cristo en la Eucaristía y pidió a Dios una "señal".

De manera imprevista, según la tradición católica, algunas gotas de sangre salieron de la hostia consagrada, cayendo sobre el corporal (el lienzo que se extiende en el altar, encima del ara, para poner sobre él la hostia y el cáliz). La tela se guarda en la catedral de Orvieto (centro de Italia).
Tras la misa, el Pontífice preside por las calles del centro de Roma la Procesión del Altísimo, que concluyó en la basílica de Santa María La Mayor, una de las cuatro grandes basílicas de Roma junto con San Pedro del Vaticano, San Juan de Letrán y San Pablo Extramuros.

1 comentario:

Anónimo dijo...

ES CONOCIDA LA TESIS DE LA CONVERSION HIPOSTATICA,
Según la cual las especies de pan y vino se tranmutan en el cuerpo y la sangre reales de CRISTO (en esencia) pero manteniendo las apariencias sensibles usuales.
De modo semejante se cree en la textualidad LITERAL de los Evangelios en el sentido de "ser"
(no meramente que contengan) la Palabra de Dios.
A estas Tesis, y otras del mismo nivel de análisis teológico tradicional, llamamos FUNDAMENTALISMO. Por ejemplo: es esencial al cristianismo católico la concepción virginal de María en la Anunciación, y de los "corolarios" que se desprenden de este "dogma" (principio a priori, bien establecido por la tradición ecuménica católica).
Ahora bien, en lo personal, no estoy en condiciones de afirmar tales verdades anagógicas de un modo LITERAL, sino meramente "simbólico", por tanto, para el Clero y para la comunidad formal de la Fé, como decía San Pablo, soy sólo una semilla, algo que no está preparado para los "misterios mayores".
Desde mi punto de vista, simbolista, la verdad (saber) transcurre por otras vias: cuando la verdad cristiana se muestra en el tiempo transhistórico de la metáfora colectiva, o en el devenir de una Idea Pura, sublime, de un Mito que la humanidad crea y encarna en su propia historia, no negamos su "realidad" sino su materialidad (meramente) contingente.
Por ejemplo, las Bienaventuranzas Evangélicas, ¿cuántos cristos las han encarnado? y ¿cuanto dolor y autocontradicción deben caber en el alma humana, para de ELLA, verdaderamente, nazcan Jesús y su reino?
La metáfora, sin ser literal, no es falsa, al contrario, ahonda la comprensión del Misterio: ¿no es semejante la humanidad a Maria Santísima, y de esta alma mater humana, no ha de nacer el Hijo del Hombre?
¿Cómo puede ser el cielo físico su morada, si no descubre el reino del amor y la paz en su corazón, y lo construye en medio de él?
Entonces, como Jesús decía: "Id, pues, con cuidado".
LA METAFORA ES LA HIPOSTASIS DEL SENTIDO, no que este sentido tenga una hipóstasis literal (estudie esto). ¡No al pié de la letra!
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