Día Mundial CVX 2008
En los dos últimos Proyectos presentamos la convocatoria y propusimos el lema para Fátima 2008. En este número les ofrecemos algunas sugerencias para la oración, con el fin de que en el próximo Día Mundial 2008 nos preparemos espiritualmente hacia nuestra Asamblea General.
Aspiramos a que toda la Comunidad prepare Fátima 2008 con los aportes que vienen de su experiencia de vida, con la presencia de los/as delegados/as, y con la oración personal y comunitaria.
El mandato de las pasadas Asambleas es muy claro: la CVX es una sola Comunidad Mundial – un cuerpo apostólico con una misión común. De estas opciones asumidas por la Comunidad nos resulta claro hacia dónde el Señor nos llama y, por lo tanto, hacia dónde queremos caminar.
En Fátima 2008, nos proponemos presentarnos como Asamblea General al Señor y preguntarnos, si vivimos esta elección con coherencia. Su luz nos hará ver la verdad y la falsedad de nuestra vida, nos moverá a acortar la distancia entre lo que deseamos y lo que vivimos, entre lo que decimos de palabra y lo que practicamos.
Como inspiración, hemos tomado la siguiente frase de Marcos 6, 30: “los Apóstoles se reunieron con Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado”. La herramienta ignaciana para este trabajo procede del ejercicio de los Tres Binarios, en los Ejercicios Espirituales.
Haremos un balance de la vida de nuestra Comunidad Mundial, compartiendo las experiencias de las Comunidades Nacionales. Esto nos dará mucha luz, pero no es suficiente. Queremos sobretodo presentarnos delante de la Luz que no engaña, y hacer un acto de verdad y un acto de confianza, pidiendo al Señor la ayuda para crecer en coherencia de vida.
Los Discípulos hacen este acto de verdad y de confianza en asamblea comunitaria con el Maestro, incluso en medio a una vida donde les faltaba tiempo para comer, como nos dice el Evangelio de Marcos. Por lo visto, ya en esos tiempos llevaban una vida ocupada...
Las primeras comunidades hacen igualmente un ejercicio de verdad y confianza, después de la partida del Señor en la Ascensión. La propuesta de este número de Proyectos es precisamente la contemplación de los Hechos de los Apóstoles, como fuente de inspiración para la preparación orante hacia Fátima 2008.
Aspiramos a que toda la Comunidad prepare Fátima 2008 con los aportes que vienen de su experiencia de vida, con la presencia de los/as delegados/as, y con la oración personal y comunitaria.
El mandato de las pasadas Asambleas es muy claro: la CVX es una sola Comunidad Mundial – un cuerpo apostólico con una misión común. De estas opciones asumidas por la Comunidad nos resulta claro hacia dónde el Señor nos llama y, por lo tanto, hacia dónde queremos caminar.
En Fátima 2008, nos proponemos presentarnos como Asamblea General al Señor y preguntarnos, si vivimos esta elección con coherencia. Su luz nos hará ver la verdad y la falsedad de nuestra vida, nos moverá a acortar la distancia entre lo que deseamos y lo que vivimos, entre lo que decimos de palabra y lo que practicamos.
Como inspiración, hemos tomado la siguiente frase de Marcos 6, 30: “los Apóstoles se reunieron con Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado”. La herramienta ignaciana para este trabajo procede del ejercicio de los Tres Binarios, en los Ejercicios Espirituales.
Haremos un balance de la vida de nuestra Comunidad Mundial, compartiendo las experiencias de las Comunidades Nacionales. Esto nos dará mucha luz, pero no es suficiente. Queremos sobretodo presentarnos delante de la Luz que no engaña, y hacer un acto de verdad y un acto de confianza, pidiendo al Señor la ayuda para crecer en coherencia de vida.
Los Discípulos hacen este acto de verdad y de confianza en asamblea comunitaria con el Maestro, incluso en medio a una vida donde les faltaba tiempo para comer, como nos dice el Evangelio de Marcos. Por lo visto, ya en esos tiempos llevaban una vida ocupada...
Las primeras comunidades hacen igualmente un ejercicio de verdad y confianza, después de la partida del Señor en la Ascensión. La propuesta de este número de Proyectos es precisamente la contemplación de los Hechos de los Apóstoles, como fuente de inspiración para la preparación orante hacia Fátima 2008.
Ver proyecto 137, aquí
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