Venidos de distintos puntos de la capital y portando sus banderas de colores, los jóvenes recorrieron las principales arterias de la capital de Estación Mapocho hasta General Velásquez llegando al Santuario de San Alberto Hurtado, con sus cánticos, oraciones y con el orgullo del compromiso cristiano nuevamente dejaron claro el valor de la solidaridad en la construcción de país.
Los asistentes pudieron corear y bailar al ritmo de las melodías de la ciudad, siguiendo a la veintena de jóvenes que emularon a las tribus urbanas actuales y reflexionaron con las palabras de San Alberto. Posteriormente vivieron una emotiva liturgia, presidida por el Arzobispo de Santiago.
Cada año los jóvenes conocen alguna de las múltiples dimensiones del Santo, en esta oportunidad fue su corazón de chileno, así lo manifestó el Cardenal Francisco Javier Errázuriz en su homilía, “Hemos llegado aquí al santuario de un hombre que tenía un corazón que cada día estaba pleno del amor de Dios y a sus hermanos, que vivía en su corazón con Cristo y por ello se preocupaba de su Patria. Así como él, encuentren en Cristo la fuerza para ser solidarios”.
Un recorrido para reanimar el corazón
A las 13 horas los jóvenes comenzaron a llegar a Estación Mapocho y allí profundizaron en la necesidad de escuchar con el corazón, en las tres estaciones de paso se alegraron de ser chilenos, hicieron reflexión entorno a la caridad y se reconocieron como apóstoles. Alrededor de las 17 horas llegaron al Santuario donde un enorme lienzo los desafió a “Vivir en el corazón de Cristo”.
En la acogida de los peregrinos, el vicario de la Esperanza Joven, Padre Galo Fernández, señaló “Esta tarde queremos reafirmar nuestra fe en Jesús. Confirmar aquí nuestra misión. Gritar por el mundo entero, el amor que Dios nos tiene y poder anunciar el Evangelio a quienes aún no conocen su mensaje, que es vida solidaridad y alegría”.
Movidos por la solidaridad
“Me animo a caminar con Alberto Hurtado porque es una instancia para compartir con la gente… es un momento de solidaridad con otras personas. Yo vengo hace cuatro años y siempre los mensajes de las estaciones motivaban mi corazón y me animan.
Para mí San Alberto es una gran persona que te motiva a cambiar el mundo con sus mensajes”. Leonardo Rojas, Parroquia San Francisco de Asís de la Alameda.
“Vengo hace dos años a caminar porque admiramos la caridad, fe y amor y por supuesto el trabajo que hizo el Padre Hurtado. Nosotros vivimos la solidaridad a través de nuestro grupo Gente para Servir, donde trabajamos mucho con los conceptos del Padre Hurtado.
A mi me gusta su alegría de servir la fe ciega en Cristo y el amor a la Iglesia Católica esos tres componentes que a los jóvenes nos toca seguir. Abigail Jofré, Parroquia Nuestra Señora del Carmen, Peñaflor.
Fuente: Comunicaciones Vicaría de la Esperanza Joven Iglesia.cl
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