Un Saludo a los Jesuitas en el Apostolado Parroquial

Un saludo de los electores de la CG 35 que trabajan o han trabajado en Parroquias a los jesuitas en el apostolado Parroquial


Roma, 29 de febrero, 2008
Hemos sido bendecidos, por primera vez en la historia de la Compañia, con la presencia de 50 delegados que participan en la CG 35 con ricas experiencias de su ministerio parroquial, realizado en diversos contextos y culturas en el mundo.

Agradecemos a Dios por darnos una nueva visión y un nuevo vigor a nuestro Ministerio parroquial, a través del decreto 19 de la CG 34. Al mismo tiempo que reafirmamos estas demandas profundas, nos comprometemos a integrarlas progresivamente en nuestros servicios pastorales.

Es una Gracia contar con más de 4000 jesuitas en nuestros Ministerios Parroquiales. Esta Gracia nos invita a una mayor colaboración con la iglesia, - en la que mujeres y hombres tengan el lugar que merecen - , que celebra compartiendo el pan y la palabra, fortalecida por la espiritualidad ignaciana de forma “bien planificada, creativa e inculturada” (CG 34, d 19, 3).


Tenemos el desafío de no reducir nuestras parroquias a una “fuente” bien cercada, en la que esperamos que llegue la gente. Debemos ir al encuentro de los “sectores marginados, los pobres, los jóvenes y los obreros” (Kolvenbach). Este espíritu misionero “se convierte en una profunda revelación divina” (Benedicto XVI).


Nos dedicamos a “convertir nuestras parroquias jesuitas en modelos” (Arrupe), a través del servicio de la fe y la promoción de la justicia; al mismo tiempo, nos comprometemos en el diálogo con las diferentes religiones, iglesias, culturas y tradiciones.

Como parte de nuestro apostolado parroquial asumimos los objetivos de la iglesia local, formando redes con otros jesuitas en diversos apostolados; así como con otros movimientos civiles, eclesiales, “por una nueva tierra y un nuevo cielo” (Rev. 21,1).


Nos comprometemos a asumir las nuevas luces y conocimientos de la CG 35, particularmente en lo relacionado a la gran preocupación por la ecología y la defensa amorosa de la creación de Dios.


Estamos felices de tener como nuevo General al P. Adolfo Nicolás, S.J., quien durante cuatro años (2000-2004) realizó su apostolado en un contexto parroquial. Estamos seguros de contar con su apoyo y animación para la formación y coordinación del apostolado pastoral jesuítico, comenzado desde abajo, al nivel de las Provincia y Asistencias.


Continuaremos practicando nuestra solidaridad jesuítica como Amigos en el Señor, entusiasmándonos y apoyándonos para alcanzar el magis en nuestro, ministerio parroquial. Para realizar nuestros objetivos, contamos con nuestro apoyo fraterno y nuestra ferviente oración por cada uno de nosotros.

Firma de 50 delegados

Fuente: CPAL