Lavar los pies
¿Quién refleja esta lógica en mi mundo?
“Se levanta de la mesa, se quita el manto, y tomando una toalla, se la ciñe. Después echa agua en una jofaina y se puso a lavarles los pies a los discípulos y a secárselos con la toalla que llevaba ceñida” (Jn 13,4-5)
Dar descanso y alivio tras la fatiga del camino.
Mostrarle al otro que es merecedor de una dignidad profunda, sea cual sea su situación.
Invertir los rangos y categorías.
Acariciar los cansancios.
Despojarse uno de pompas y honras, de títulos y méritos, para vestirse la toalla de quien está dispuesto a cuidar del otro.
Es lo que haces tú, un Dios hecho hombre, un hombre que refleja Dios, y ese gesto genera sorpresa e incomprensión, resistencia y miedo.
¿Quién va a abrazar hoy esta lógica absurda?
¿Por qué hacerse pequeño y no grande?
¿Por qué agacharse para cuidar del sencillo?
Fuente: Jesuitas de Castilla
2 comentarios:
ESTE GESTO SAGRADO ILUSTRA LA PORTADA DE LA PAGINA.
No es un gesto meramente simbólico-ritual, sino que tiene que ver con La Parábola del Buen Samaritano.
Comporta el riesgo de asumir la realidad social de un-otro (el prójimo) que puede ser muy distinta de la nuestra.
A veces ni siquiera lo hacemos con los de nuestra propia casa, cuando nadie se toma la molestia de lavar al pariente anciano, y hacerlo bien, con cuidado, respeto y amor.
Con una sonrisa en los labios, con una dulce palabra en la boca.
Se equivocan quienes piensan que la gente común, el cristiano "silvestre" (no evangelizado) tiene menos compasión o caridad que los laicos comprometidos, los consagrados formalmente, o los teólogos de línea apostólica y romana. Generalmente es lo contrario. Limpiar un perro herido, es cosa de niños, de adolescentes "rebeldes",
de viejos medio chiflados.
Mas raro todavia es ver que se socorra a quien se muere en la calle. Si llegamos a estar en ese lamentable trance, hay que rogar que ocurra en una población periférica, porque ahi tenemos algunas posibilidades. En los barrios altos, con gente católica de clase y condición, tendriamos muy pocas chances de ser ayudados.
...Cierto dia sacaron de la Iglesia, con la verde policía, a un pobre mendigo por el "delito" de rezar aparatosamente, lo que molestaba la "espiritualidad" de oropeles vacios, y de rituales puramente formales, con que se proclamaba la supuesta exaltación de los humildes.-
Un poco exagerado el comentario anterior, suena casi "liviano".
No es asunto de que practiquemos la solidaridad (o caridad en condiciones graves) y "santas pascuas".
Pasa algo más de fondo: los sacramentos son indisolubles de la vida, en Jesús, y en sentido universalista también. Pero lo simbolico ritual tiene además un sentido central.
No es reprimiendo la litugia como fiesta, que logramos conciliar los Dos Mundos.
Se necesita sublimación, y el ritual ayuda mucho, con tal que no sea si mismo visto como un cumplimiento completo de la ley del amor, porque es el INICIO necesario pero no todavía suficiente, y eso será cuando Dios quiera, y el hombre pueda y quiera.
Y la mujer también, obvio.
Como María Santísima que, sabiéndolo todo, guardaba la inocencia de su corazon en el misterio del corazón divino que en su vientre latía: Jesús.
Por eso la oración es el Octavo sacramento, porque Jesús entrega su espiritu en oración muchas veces y otra más en la Cruz.
De quien decimos: que resucitó antes de nacer, y nunca murió, en sentido poético, claro, mas verdadero que si fuese literal.
Ascendio a los cielos, ¿acaso tiene tiene un sentido hiperfísico?
Muy bien, quizás los guardianes del orden establecido, como Saulo de Tarso, tengan una versión más interesante.
Me gustaria conocerla. Porque si bien es muy autodidacta conversar estos temas con el "plasma de la eternidad" sería más humano que hubiese otros comentarios, no tan "santitos".
Y eso lo deploro de la Divina Institución: su falta de humanidad.
GRACIAS. Por nada.
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