lunes, 29 de diciembre de 2008

Chile: Navidad en la calle: con sencillez y alegría se vivió Nochebuena

Cientos de jóvenes acogieron este año la invitación de la Vicaría Pastoral Universitaria a compartir el nacimiento de Jesús junto a hermanos y hermanas que se encuentran en las calles de Santiago.


Más de 370 personas, entre ellas, jóvenes y también familias, llegaron la tarde del miércoles 24 de diciembre hasta la Vicaría Pastoral Universitaria para celebrar "Navidad en la Calle".Entusiasmo y muchas ganas de compartir el nacimiento de Jesús con hermanos que viven en calles, plazas y hospederías, se reflejaba en los rostros de todos los jóvenes, especialmente de quienes se integraban a esta actividad por primera vez.


Pasadas las cinco de la tarde llegaron los primeros grupos de participantes a la VPU para finalizar los últimos preparativos antes de partir a los lugares asignados para pasar Nochebuena. Creatividad, ingenio, sencillez, pero por sobretodo alegría reunía a todos los voluntarios.



Preparando el Corazón

Aunque es primera vez que se integra a esta actividad de la VPU, Felipe Díaz, se preparó con muchas ganas para celebrar y dar un nuevo espíritu a Navidad. “Para mí compartir con las personas que se encuentran en el hogar Santa Ana hace mucho más bonita esta fiesta y le da verdadero sentido cristiano”.


Para Sergio Contreras, de la Pastortal del Intituto Profesional de Chile, ésta fue su segunda Navidad en la VPU. Junto a su grupo visitaron la hospedería Padre Lavín que acoje alrededor de 100 personas. “Mi motivación es pasar una navidad acercándome a las personas que más lo necesitan. Lo más importante es abrir el corazón y recibir el amor del Señor que nace para compartirlo con nuestros hermanos".


Romina Fuenzalida, estudiante de la Universidad Católica, supo de la actividad a través de una miga y quedó muy motivada para participar por eso es que no dudó en inscribirse. Con su grupo prepararon villancicos y angelitos hechos de papel por ellos mismos, como gesto para compartir con las abuelitas del Hogar Santa Ana.

“Quería dar un nuevo sentido a la Navidad por eso quise participar. Vivir esta Navidad en la Calle es una forma de agradecer a Dios por la familia que tengo porque muchas personas no la tienen. En el hogar hay abuelitas que quizás no tienen la posibilidad de compartir esta fiesta con sus familiares y si yo puedo cooperar en acompañarlas por qué no hacerlo”.



Envío

Luego de reunirse en la Vicaría, los participantes junto al equipo organizador de Navidad en la Calle, peregrinaron por las calles del centro de Santiago hasta Plaza de Armas. En el frontis de las Catedral Metropolitana y con un pesebre como telón de fondo se efectuó un emotivo envío a los jóvenes a los 20 lugares designados para vivir Navidad. Durante esta ceremonia, el padre Tomás Scherz, Vicario de la Pastoral Universitaria invitó a los jóvenes a ir como pastores, alegres y sencillos, a anunciar el nacimiento de Jesús, recordando así el lema que dio sentido a la celebración navideña de la VPU este año. “Queremos ir a Belén como los pastores que no llevan nada, pero que van con gozo a mirar a un niño, expresión de la pequeñez del ser humano".


Una vez finalizado el envío los jóvenes organizados por grupos partieron rumbo a las diversas hospederías, plazas, barrios, hogares de ancianos y hospitales para salir al encuentro de sus hermanos y hermanas. Entre ellos estuvo el grupo de Plaza de Armas, que recogió las historias de vida de los transeúntes, comerciantes, artistas callejeros y de todos quienes hacían las últimas compras navideñas en el centro de Santiago.



En las hospederías también se vivió Navidad

En "Francisca Romana" habían unas veinte mujeres y alrededor de 11 niños. María Fernanda Hernández, una de las participantes, comentó que para ella la experiencia había sido un verdadero regalo para el alma. "Es primera vez que participo y por lo mismo pensé que al llegar a la hospedería las personas tendrían prejuicios pero me di cuenta que era muy fácil identificarse con ellas. Si hay personas que están solas, qué mejor regalo que regalar el tiempo y el cariño de uno".


Paulina Coliman, 24 años, egresada de educación parvularia, vivió este año por primera vez Navidad en la Calle y su destino fue la Hospedería San Alfonso, alì acudió junto a su hermano Marcelo. “Quise participar porque me había llamado la atención lo que había visto en la televisión en años anteriores y ahora quise ver si podía vivir esto”. Respecto de las vivencias de esta Navidad distinta, Paulina cuenta que le gustó mucho. "Me sentí bien y cómoda. No sabía cómo nos iba a recibir la gente, pero todo fue super bueno. Indudablemente participaría otra vez”. Parecido es el testimonio de Mauricio Sepúlveda, “fue una buena experiencia, que tiene que ver con algo más personal, ya que yo también me sentía solo entonces al final se produjo un acompañamiento mutuo entre todos".


Luego de las visitas a los lugares todos regresaron a la Vicaría, compartieron sus experiencias y luego participaron de la misa del Gallo, a eso de la una de la madrugada, celebrada por el Padre Tomás en la Plaza Santa Ana.


Fuente:VPU
Santiago, 29/12/2008

1 comentario:

Anónimo dijo...

ES PRECISAMENTE LA IDEA, HACER DEL ENTORNO URBANO UN SEGUNDO HOGAR, QUE LA CALLE NO SEA UN DESOLADO MUNDO DE METAL Y ACERO O NEON, SINO UN LUGAR O CONTEXTO QUE PUEDA ACOJER AL HOMBRE, LA MUJER EL NIÑO, ETC.

Es posible ser feliz con lo que se tiene, pero no sin compartir lo que se tiene con los demás, en este caso, mas que una iniciativa religiosa o moral es un asunto completamente Burgués, es decir, que la ciudad sea Burgo, o lugar
habitado realmente.

Felicito a los Cristianos por sus inciativas, es de esperar que los propiamente Católicos estemos
a la par.

El Sofista.