"Iglesia somos todos y no se reduce a los sacerdotes, a los obispos y al Vaticano"
"Ser Iglesia es sentirse en las manos de Dios, que es padre, nos acaricia y nos espera"
(José M. Vidal).- Audiencia papal con la Plaza de San Pedro de nuevo llena a rebosar. La gente acude a la fuente de la esperanza, a ver al Papa de los pobres.Y Francisco nunca defrauda y les habla de "un Dios que siempre primerea y perdona" y de una Iglesia que tiene que bendecir. Porque los cristianos "somos la gente que bendice".
Lectura del libro del Génesis: "El Señor dijo a Abraham: sal de tu tierra, de tu patria, y la casa de tu padre y vete a la tierra que te indicaré...Bendeciré a los que te bendigan. Maldeciré a los que te maldigany en tí serán benditas todas las familias de la tierra"
Algunas frases del discurso del Papa
"Esperamos que termine la audiencia sin que llueva"
"Hablar de la Iglesia es hablar de nuestra madre, de nuestra familia"
"la Iglesia no es una institución centrada en sí misma ni una ONG"
"Iglesia somos todos y no debe reducirse a los sacerdotes, a los obispos y al Vaticano. Iglesia somos todos. Todos, familia e la madre"
"La Iglesia no nace en un laboratorio. Fue fundada por Jesús"
"Es un pueblo con una historia larga a sus espaldas"
"Con una prehistoria en el Antiguo Testamento"
"Dios no llama a Abraham sólo como individuo, sino a toda su parentela..."
"Desde Abraham, Dios forma un pueblo, para que lleve su bendición a todas las familias de la tierra. En el seno de este pueblo nace Jesús"
"Es el mismo Dios el que da vida a este pueblo"
"Algo inaudito: es el propio Dios el que llama a la puerta de Abraham y toma la iniciativa"
Saludos del Papa en español
Queridos hermanos y hermanas:
Hoy comienzo una serie de catequesis sobre la Iglesia. Es como un hijo que hable de su madre, de su familia, porque la Iglesia no es una ONG, ni debe restringirse al clero y al Vaticano. La Iglesia somos odos. La Iglesia es una realidad muy amplia, abierta a toda la humanidad, y con una historia muy antigua. Fue fondata por Cristo, pero hunde sus raíces en el Antiguo Terstamento. Tres puntos quiero indicar sobre esta historia: lo primero que llama la atención es que al inicio Dios no llamó a Abrahán solo, como individuo aislado, sino que acogió también su casa, su familia, sus siervos. Quizo formar un pueblo, para que llevara su bendición a toda la tierra.
Hoy comienzo una serie de catequesis sobre la Iglesia. Es como un hijo que hable de su madre, de su familia, porque la Iglesia no es una ONG, ni debe restringirse al clero y al Vaticano. La Iglesia somos odos. La Iglesia es una realidad muy amplia, abierta a toda la humanidad, y con una historia muy antigua. Fue fondata por Cristo, pero hunde sus raíces en el Antiguo Terstamento. Tres puntos quiero indicar sobre esta historia: lo primero que llama la atención es que al inicio Dios no llamó a Abrahán solo, como individuo aislado, sino que acogió también su casa, su familia, sus siervos. Quizo formar un pueblo, para que llevara su bendición a toda la tierra.
Lo segundo es que no es Abrahán quien convoca ese pueblo; no es una obra humana para la que se pide la bendición de Dios, es Dios quien toma la iniciativa. Su amor es la clave de todo. El tercer punto non hace caer en la cuenta que, pese a ponernos en camino, como Abrahán, muchas veces fallamos, nos resistimos. Es la historia de la fidelidad de Dios y de la infidelidad del pueblo. Es la paciencia de Dios la que no se cansa de educarnos, come un padre a su hijo, no se cansa de perdonarlo. El reconocernos pecadores nos permite acoger su misericordia; esto hace crecer la Iglesia, y no nuestros méritos, sino la experiencia cotidiana del amor de Dios.
***
Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española, en particular a los grupos provenientes de España, México, Puerto Rico, Argentina y otros países latinoamericanos. Invito a todos a pedir al Señor fidelidad a su Palabra y docilidad para llevar su bendición y su amor a toda la Tierra. Muchas gracias.
***
Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española, en particular a los grupos provenientes de España, México, Puerto Rico, Argentina y otros países latinoamericanos. Invito a todos a pedir al Señor fidelidad a su Palabra y docilidad para llevar su bendición y su amor a toda la Tierra. Muchas gracias.
Saludo en italiano
Recuerda la Jornada mundial de los Refugiados
"El número está creciendo: millones de familias, millones"
"Compartamos sus miedos y sus incertidumbres y aliviemos sus sufrimientos"
"Pensemos que Jesús fue un refugiado. Tuvo que huir, para salvar su vida, con San José y la Virgen. Tuvo que irse a Egipto. Él fue un refugiado. Recemos a la Virgen que conoce el dolor de los refugiados, que bendida a estos hermanos nuestros". Y reza un avemaría pos los refugiados.
"María, madre de los refugiados, ora por nosotros"
Pide a los jóvenes que la eucaristía sea el principal alimento de su fe.
Texto completo de la catequesis del Papa
La Iglesia: Dios forma a un pueblo
Queridos hermanos y hermanas ¡buenos días! Y felicitaciones a ustedes porque son valientes, con este tiempo que no se sabe si llueve o no llueve, pero ¡valientes eh! Esperemos que podamos terminar la audiencia sin agua. Que el Señor tenga piedad de nosotros.
Hoy comienzo un ciclo de catequesis sobre la Iglesia. Es un poco como un hijo que habla de la propia madre, de la propia familia. Hablar de la Iglesia es hablar de nuestra madre, de nuestra familia. En efecto, la Iglesia no es una institución con finalidad en sí misma o una organización privada, una ONG, ni mucho menos debe restringir su mirada al clero o al Vaticano...La Iglesia piensa. Pero la Iglesia somos todos. ¿De quién hablas tú? No, de los curas. Ah, la Iglesia son parte de la Iglesia pero la Iglesia somos todos, ¡eh! No limitarla a los sacerdotes, a los obispos, al Vaticano. Ellos son parte de la Iglesia pero la Iglesia somos todos, todos familia de la madre. Y la Iglesia es una realidad mucho más amplia, que se abre a toda la humanidad y que no nace en un laboratorio, la Iglesia no nació en laboratorio, no nació improvisadamente. Está fundada por Jesús, pero es un pueblo con una larga historia a sus espaldas y una preparación que comenzó mucho antes que Cristo mismo.
1. Esta historia, o "prehistoria" de la Iglesia, ya se encuentra en las páginas del Antiguo Testamento. Hemos escuchado el libro del Génesis, Dios escogió a Abraham, nuestro padre en la fe, y le pidió que se marchara, que abandonara su patria natal y se fuera hacia otra tierra que Él le mostraría (cf. Gn 12,1-9). Y en esta vocación Dios llamó a Abraham solo, como individuo, sino que desde el principio implicó a su familia, a sus familiares y a todos los que estaban al servicio en su casa. Después, una vez en camino - sí, así comenzó a caminar la Iglesia - luego Dios ensanchará todavía el horizonte y colmará a Abraham con su bendición, prometiéndole una descendencia numerosa como las estrellas del cielo y como la arena de la orilla del mar. El primer hecho importante es éste: comenzando con Abraham, Dios forma un pueblo para que lleve su bendición a todas las familias de la tierra. Y dentro de este pueblo nació Jesús. Es Dios que hace este pueblo, esta historia, la Iglesia en camino. Y ahí nace Jesús: en este pueblo.
2. Un segundo elemento: no es Abraham quien construye un pueblo en torno a sí, sino que es Dios quien da vida a este pueblo. Por lo general, era el hombre quien se dirigía a la divinidad, tratando de salvar la distancia y pidiendo apoyo y protección. La gente rezaba a los dioses, ¿no? A las divinidades. Pero en este caso, sin embargo, somos testigos de algo sin precedentes: es Dios mismo quien toma la iniciativa - pero escuchemos esto ¡eh! Es Dios mismo que llama a la puerta de Abraham y le dice: "sigue adelante, vete de tu tierra, comienza a caminar y yo haré de ti un gran pueblo". Y esto es el comienzo de la Iglesia y en este pueblo nace Jesús. Pero Dios toma la iniciativa y dirige su palabra al hombre, creando un vínculo y una nueva relación con él. Pero padre, ¿cómo es esto? ¿Dios nos habla? "Sí". ¿Y no podemos hablar con Dios? Sí pero, ¿nosotros podemos tener una conversación con Dios? "Sí". Esto se llama oración, pero es Dios que ha hecho esto desde el inicio.
Así pues, Dios forma un pueblo con todos los que escuchan su Palabra y se ponen en camino, confiando en Él. Ésta es la única condición, confiarse en Dios. Si tú te fías de Dios, lo escuchas y te pones en camino, esto es hacer Iglesia. Esto es hacer la Iglesia. El amor de Dios lo precede todo.
Dios está siempre primero, llega antes que nosotros, él nos precede. El profeta Isaías o Jeremías, no recuerdo bien, decía que Dios es como la flor del almendro porque es el primer árbol que florece en primavera. Para decir que Dios siempre florece antes que nosotros. Cuando nosotros llegamos Él nos espera, Él nos llama, Él nos hace caminar. Siempre nos anticipa. Y esto se llama amor porque Dios nos espera siempre. "Pero padre, yo no creo esto porque si usted supiera, padre. Mi vida ha sido tan fea ¿cómo puedo pensar que Dios me espera? "Dios te espera. Y si fuiste un gran pecador te espera más y te espera con tanto amor, porque Él es el primero. ¡Es ésta la belleza de la Iglesia, que nos lleva a este Dios que nos espera! Precede a Abraham, incluso precede a Adán.
Así pues, Dios forma un pueblo con todos los que escuchan su Palabra y se ponen en camino, confiando en Él. Ésta es la única condición, confiarse en Dios. Si tú te fías de Dios, lo escuchas y te pones en camino, esto es hacer Iglesia. Esto es hacer la Iglesia. El amor de Dios lo precede todo.
Dios está siempre primero, llega antes que nosotros, él nos precede. El profeta Isaías o Jeremías, no recuerdo bien, decía que Dios es como la flor del almendro porque es el primer árbol que florece en primavera. Para decir que Dios siempre florece antes que nosotros. Cuando nosotros llegamos Él nos espera, Él nos llama, Él nos hace caminar. Siempre nos anticipa. Y esto se llama amor porque Dios nos espera siempre. "Pero padre, yo no creo esto porque si usted supiera, padre. Mi vida ha sido tan fea ¿cómo puedo pensar que Dios me espera? "Dios te espera. Y si fuiste un gran pecador te espera más y te espera con tanto amor, porque Él es el primero. ¡Es ésta la belleza de la Iglesia, que nos lleva a este Dios que nos espera! Precede a Abraham, incluso precede a Adán.
3. Abraham y los suyos escuchan la llamada de Dios y se ponen en camino, no obstante no sepan bien quién sea este Dios y dónde los quiera conducir.
Es verdad porque Abraham se pone en camino de este Dios que le ha hablado, pero no tenía un libro de teología para estudiar quién era este Dios. Se confía, se fía del amor. Dios le hace sentir el amor y él se confía.
Pero esto no significa que ellos estén siempre convencidos y fieles. Es más, desde el comienzo hay resistencia, el repliegue en sí mismos y sus propios intereses y la tentación de regatear con Dios y resolver las cosas a modo propio. Y están son las traiciones y los pecados que marcan el camino del pueblo a lo largo de toda la historia de la salvación, que es la historia de la fidelidad de Dios y de la infidelidad del pueblo. Pero Dios no se cansa, Dios tiene paciencia, tiene tanta paciencia y en el tiempo continúa a educar y a formar a su pueblo, como un padre con el propio hijo. Dios camina con nosotros. Dice el profeta Oseas: "yo he caminado contigo y te he enseñado a caminar como un papá enseña a caminar al niño". Hermosa figura de Dios. Y así es con nosotros. Nos enseña a caminar.
Y es la misma actitud que mantiene con respecto a la Iglesia. También nosotros de hecho, aún en nuestro propósito de seguir al Señor Jesús, tenemos experiencia cada día del egoísmo y de la dureza de nuestro corazón.
Pero cuando nos reconocemos pecadores, Dios nos llena de su misericordia y de su amor. Y nos perdona, nos perdona siempre. Y es precisamente esto que nos hace crecer como pueblo de Dios, como Iglesia: no es nuestra habilidad, no son nuestros méritos - somos poca cosa nosotros ¡eh! No es esto. Sino que es la experiencia cotidiana de cuánto el Señor nos ama y nos cuida. Esto es lo que nos hace sentir verdaderamente suyos, en sus manos y nos hace crecer en la comunión con Él y entre nosotros. Ser Iglesia es sentirse en las manos de Dios, que es padre y nos ama, nos acaricia, nos espera, nos hace sentir su ternura. ¡Y esto es muy bello!
Es verdad porque Abraham se pone en camino de este Dios que le ha hablado, pero no tenía un libro de teología para estudiar quién era este Dios. Se confía, se fía del amor. Dios le hace sentir el amor y él se confía.
Pero esto no significa que ellos estén siempre convencidos y fieles. Es más, desde el comienzo hay resistencia, el repliegue en sí mismos y sus propios intereses y la tentación de regatear con Dios y resolver las cosas a modo propio. Y están son las traiciones y los pecados que marcan el camino del pueblo a lo largo de toda la historia de la salvación, que es la historia de la fidelidad de Dios y de la infidelidad del pueblo. Pero Dios no se cansa, Dios tiene paciencia, tiene tanta paciencia y en el tiempo continúa a educar y a formar a su pueblo, como un padre con el propio hijo. Dios camina con nosotros. Dice el profeta Oseas: "yo he caminado contigo y te he enseñado a caminar como un papá enseña a caminar al niño". Hermosa figura de Dios. Y así es con nosotros. Nos enseña a caminar.
Y es la misma actitud que mantiene con respecto a la Iglesia. También nosotros de hecho, aún en nuestro propósito de seguir al Señor Jesús, tenemos experiencia cada día del egoísmo y de la dureza de nuestro corazón.
Pero cuando nos reconocemos pecadores, Dios nos llena de su misericordia y de su amor. Y nos perdona, nos perdona siempre. Y es precisamente esto que nos hace crecer como pueblo de Dios, como Iglesia: no es nuestra habilidad, no son nuestros méritos - somos poca cosa nosotros ¡eh! No es esto. Sino que es la experiencia cotidiana de cuánto el Señor nos ama y nos cuida. Esto es lo que nos hace sentir verdaderamente suyos, en sus manos y nos hace crecer en la comunión con Él y entre nosotros. Ser Iglesia es sentirse en las manos de Dios, que es padre y nos ama, nos acaricia, nos espera, nos hace sentir su ternura. ¡Y esto es muy bello!
Queridos amigos, este es el proyecto de Dios, el proyecto ¿no? Cuando ha llamado a Abraham, Dios pensaba en esto: formar un pueblo bendecido por su amor y que lleve su bendición a todos los pueblos de la tierra. Este proyecto no cambia, es siempre vigente. En Cristo ha tenido su cumplimiento y aún hoy Dios continúa realizándolo en la Iglesia. Pidamos entonces la gracia de permanecer fieles a la secuela del Señor Jesús y a la escucha de su Palabra, listos a partir cada día, como Abraham, hacia la tierra de Dios y del hombre, nuestra verdadera patria, y así transformarnos en bendición, signo del amor de Dios para todos sus hijos.
Me gusta pensar que un sinónimo, otro nombre que podríamos tener nosotros cristianos sería esto: son hombres y mujeres, gente que bendice. El cristiano con su vida debe bendecir siempre, bendecir a Dios y bendecir también a todos nosotros. ¡Nosotros cristianos somos gente que bendice, que sabe bendecir! ¡Ésta es una hermosa vocación!
Me gusta pensar que un sinónimo, otro nombre que podríamos tener nosotros cristianos sería esto: son hombres y mujeres, gente que bendice. El cristiano con su vida debe bendecir siempre, bendecir a Dios y bendecir también a todos nosotros. ¡Nosotros cristianos somos gente que bendice, que sabe bendecir! ¡Ésta es una hermosa vocación!
RD
Audiencia general: Francisco inicia nuevo ciclo de catequesis
(SÓLO VÍDEO) El Papa ha comenzado en la audiencia general un nuevo ciclo decatequesis para explicar qué es la Iglesia.
Dijo que no es una simple "institución” sino que es un pueblo, una madre, una familia con la que Dios quiere bendecir a todos los pueblos de la tierra y comunicarles su amor.
RESUMEN DE LA CATEQUESIS DEL PAPA EN ESPAÑOL
Queridos hermanos y hermanas,
Hoy comienzo una serie de catequesis sobre la Iglesia. Es como un hijo que hable de su madre, de su familia, porque la Iglesia no es una ONG, ni debe restringirse al clero y al Vaticano. La Iglesia somos todos.
La Iglesia es una realidad muy amplia, abierta a toda la humanidad, y con una historia muy antigua. Fue fundada por Cristo, pero hunde sus raíces en el Antiguo Testamento. Tres puntos quiero indicar sobre esta historia: lo primero que llama la atención es que al inicio Dios no llamó a Abrahán solo, como individuo aislado, sino que acogió también su casa, su familia, sus siervos.
Quiso formar un pueblo, para que llevara su bendición a toda la tierra. Lo segundo es que no es Abrahán quien convoca ese pueblo; no es una obra humana para la que se pide la bendición de Dios, es Dios quien toma la iniciativa. Su amor es la clave de todo.
El tercer punto nos hace caer en la cuenta que, pese a ponernos en camino, como Abrahán, muchas veces fallamos, nos resistimos. Es la historia de la fidelidad de Dios y de la infidelidad del pueblo. Es la paciencia de Dios la que no se cansa de educarnos, come un padre a su hijo, no se cansa de perdonarlo.
El reconocernos pecadores nos permite acoger su misericordia; esto hace crecer la Iglesia, y no nuestros méritos, sino la experiencia cotidiana del amor de Dios.
El cristiano con su vida debe bendecir siempre: el Papa en su catequesis
Escuchar audio, aquí
No hay comentarios:
Publicar un comentario